Lazy Oaf: Colores, diseños imposibles y un toque de rareza

Lazy Oaf es una conocida marca londinense llena de color, nostalgia y con un punto de bizarrismo que gustará a los más atrevidos. Fue creada en 2001, y tal como nos cuenta su fundadora y principal diseñadora Gemma Shield, todo comenzó en el garaje de su padre. ¿Cuantos grandes y magníficos proyectos han empezado en un humilde garaje? 😀

Lo que empezó como una puesto de mercadillo con unas pocas camisetas ha evolucionado hasta ofrecer una completa línea de ropa: camisas, pantalones, gorros, vestidos, zapatos e incluso joyas. Todo en su particular línea creativa, claro.

Nuestra filosofía de diseño no está influenciada por las tendencias, sino que está centrada en una única visión direccional con referencias de lo que vemos en la calle y la nostalgia de juventud. Nos gusta diseñar ropa que te haga sonreír.

Y es cierto que de su ropa pueden decirse muchas cosas, excepto que es aburrida. Absolutamente todas sus prendas tienen un punto divertido y extraño. La ropa ideal si la discreción no es lo vuestro. 😛

Colección lazy oaf

Podéis encontrar todas su creaciones en la web de Lazy Oaf, en su pequeña tienda del Soho y en más de 250 tiendas de todo el mundo.

De las camisetas para ellos, nos enamoran particularmente estas. Quien no necesita una camiseta de Mill Burray o una de Fix tha Police en su vida…

Camisetas lazy oaf ellos
Camisetas ellos lazy oaf
Camisetas diseño lazy oaf

Como veis, el buen humor es clave en los diseños de Lazy Oaf. Y aun no habéis visto las colecciones para ellas. Gatos, mil colores y originalidad ochentera al poder. Negadnos que algunos de sus diseños no os teletransportan a cierta ropa de vuestra infancia.

Lazy oaf
Retro lazy oaf
Camisetas lazy oaf ellas
Camiseta hot dog lazy oaf
Camisas ochenteras lazy oaf

Somos conscientes que algunos de sus precios son un poco prohibitivos, pero rebuscando un poquito en su catálogo hemos encontrado cosas asequibles e igualmente cuquis. Claro que de vez en cuando apetece darse un capricho en ropa, ¿o no? 😉